«Imposible esclavizar sus afectos. Imposible amarrar su alma. Tan sencillo como libre. Amor.» Imposible esclavizar sus afectos. El golpe de la puerta al cerrarse lo siente como un puñetazo en la boca del estómago. Han sido varios meses de tira y afloja, agotadores, hasta que él no ha podido más y ha tomado la decisión de marcharse. Y es que, cuando al corazón se le aprieta, es inevitable que la sangre fluya menos y más sucia. Quizás si ese corazón se conformara con …